A medida que los casos de diabetes siguen aumentando en todo el mundo, también lo hacen las complicaciones asociadas, una de las cuales es la retinopatía diabética. Dentro de esta afección, una preocupación específica es el edema macular diabético (EMD). Este término bastante desalentador se refiere a una acumulación de líquido en la mácula, una pequeña zona de la retina que nos permite ver los detalles con claridad. La detección precoz de los síntomas del EMD es crucial para evitar su progresión a una discapacidad visual grave o a la ceguera. Esto es lo que debes tener en cuenta para proteger tu vista.
El edema macular diabético es frecuente en personas que padecen retinopatía diabética, una enfermedad que se produce como consecuencia de daños en los vasos sanguíneos del tejido sensible a la luz situado en la parte posterior del ojo: la retina. Con el tiempo, la diabetes debilita los pequeños vasos sanguíneos del ojo, haciendo que pierdan líquido o sangren. Esto crea hinchazón y distorsiona la visión, dando lugar al EMD.
Aunque los síntomas no siempre son evidentes, algunos afectados de EMD pueden experimentar una serie de alteraciones visuales.
He aquí algunos signos a los que debes estar atento:
Reconocer estos signos es el primer paso para gestionar y tratar el EMD. El diagnóstico precoz es crucial para evitar daños permanentes. Se recomienda que, si tienes diabetes, te sometas a un examen ocular anual con dilatación de las pupilas, aunque no presentes síntomas.
Si se detecta pronto, el EMD puede tratarse con varias terapias, a veces combinadas.
Una de ellas es la fototerapia, un tratamiento no invasivo que se lleva a cabo durante la noche utilizando el antifaz para dormir Noctura 400. Este ingenioso dispositivo emite luz de baja intensidad, lo que reduce la demanda de oxígeno de la retina durante el sueño y evita la hipoxia (falta de oxígeno), reduciendo el riesgo de pérdida de visión. Es una terapia sencilla y casera, diseñada para aliviar las complicaciones del EMD sin procedimientos invasivos ni inyecciones oculares.
Vivir con diabetes suele requerir un ajuste del estilo de vida y una vigilancia continua de tu salud general, y tu salud ocular no es una excepción. Conociendo los síntomas del EMD y actuando con rapidez si reconoces alguno de estos signos, puedes ayudar a conservar la vista. Las revisiones oculares periódicas, junto con tratamientos eficaces como la máscara de fototerapia Noctura, pueden contribuir en gran medida a prevenir la pérdida grave de visión debida al EMD.
Recuerda, en el control de la diabetes y sus complicaciones relacionadas, ser observador y proactivo marca la diferencia entre ver con claridad y los procedimientos oculares correctivos. La detección precoz y el tratamiento eficaz son las claves para mantener tu visión.
Busca ayuda inmediatamente cuando notes cualquier cambio en tu visión, porque cuando se trata de tu vista, es realmente cuestión de ver las señales.