A medida que envejecemos, es fundamental vigilar (literalmente) nuestra salud, sobre todo si padecemos enfermedades crónicas como la diabetes.
Uno de los aspectos más importantes de la atención sanitaria a los diabéticos son las revisiones oculares periódicas.
La enfermedad ocular diabética puede provocar una pérdida grave de visión o ceguera si no se detecta y trata a tiempo.
Pero, ¿en qué consisten exactamente los exámenes oculares para diabéticos?
Este artículo proporciona una explicación completa y clara, adecuada para mayores de 50 años, que ofrece tranquilidad y una mejor comprensión del proceso.
Por qué son importantes los exámenes oculares para diabéticos
Antes de profundizar en lo que ocurre durante el examen, es esencial comprender por qué estos exámenes son tan vitales.
La enfermedad ocular diabética engloba varias afecciones oculares que las personas con diabetes corren el riesgo de padecer, entre ellas:
- Retinopatía diabética: Daño en los vasos sanguíneos de la retina.
- Edema Macular Diabético (EMD): Inflamación de una zona de la retina llamada mácula.
- Cataratas: Opacidad del cristalino del ojo, que puede desarrollarse antes en las personas con diabetes.
- Glaucoma: Grupo de enfermedades oculares que pueden dañar el nervio óptico, también más frecuentes en personas diabéticas.
Si no se controlan, estas afecciones pueden provocar alteraciones importantes de la visión o ceguera.
Las revisiones oculares periódicas ayudan a detectarlas pronto, cuando son más tratables.
Aspectos básicos de un examen ocular para diabéticos
Un examen ocular diabético estándar suele incluir varios componentes.
Vamos a desglosarlo paso a paso para que sea más fácil de entender:
- Revisión del historial médico: Tu optometrista u oftalmólogo empezará revisando tu historial médico.
Preguntarán sobre el control de tu diabetes, los síntomas que puedas tener y tu estado de salud general.
Esto proporciona el contexto necesario para interpretar con precisión los resultados del examen ocular.
- Prueba de agudeza visual: Esta prueba tan familiar consiste en leer letras en una tabla optométrica.
Mide la claridad de tu visión a distintas distancias y ayuda a determinar si necesitas gafas o lentes de contacto.
- Dilatación pupilar: Para ver mejor el interior de tus ojos, tu optometrista utilizará unas gotas especiales para dilatar, o ensanchar, tus pupilas.
Este proceso dura entre 15 y 30 minutos.
Aunque la dilatación puede causar sensibilidad a la luz y visión borrosa durante unas horas, es un paso fundamental en un examen ocular diabético.
- Tonometría: Esta prueba mide la presión dentro de tus ojos.
Una presión intraocular elevada es un factor de riesgo de glaucoma, que es más frecuente en personas con diabetes.
- Oftalmoscopia/Examen de la retina: Una vez dilatadas tus pupilas, el médico examinará tu retina utilizando una lente de aumento especial y una luz brillante.
Busca signos de retinopatía diabética, como vasos sanguíneos anormales o inflamación de la retina.
- Tomografía de Coherencia Óptica (OCT): En algunos casos, puede realizarse una prueba de imagen avanzada denominada OCT.
Esta exploración proporciona un corte transversal detallado de tu retina, que ayuda a identificar incluso los cambios menores.
Pruebas adicionales
En función de los resultados iniciales, tu oculista puede recomendarte más pruebas:
- Angiografía fluoresceínica: Consiste en inyectarte un tinte especial en el brazo.
A medida que el colorante recorre tus vasos sanguíneos, una cámara toma fotos de la retina.
Esta prueba ayuda a detectar fugas o anomalías en los vasos sanguíneos.
- Prueba del campo visual: Evalúa tu visión periférica (lateral).
La pérdida de visión periférica puede ser un signo precoz de glaucoma.
Preparar tu examen
Prepararte para tu examen ocular diabético implica unos sencillos pasos:
- Lleva tu información: Asegúrate de que tienes tus medicamentos recetados actuales, una lista de los síntomas que has estado experimentando y tus niveles de azúcar en sangre.
- Organiza el transporte: Como la dilatación afecta a tu visión durante unas horas, planifica que alguien te lleve a casa después de la cita.
- Presupuesto Tiempo: El examen completo puede durar hasta dos horas, sobre todo si se requieren pruebas adicionales.
¿Qué ocurre después del examen?
Tras el examen, tu oftalmólogo hablará contigo de los resultados.
Si se identifica algún problema, te indicará los pasos siguientes, que podrían incluir un control más frecuente, cambios en el control de la diabetes u opciones de tratamiento.
Reflexiones finales
Los exámenes oculares para diabéticos son un aspecto crucial del control de la diabetes. Ayudan a detectar precozmente los problemas oculares, cuando son más tratables, y pueden evitar una pérdida importante de visión. Las revisiones periódicas son una pequeña inversión de tiempo que resulta rentable para mantener tu salud ocular y tu calidad de vida en general. Saber qué esperar puede hacer que el proceso resulte menos intimidatorio. Los exámenes oculares para diabéticos son minuciosos pero sencillos, diseñados para ayudar a preservar tu visión y detectar cualquier problema antes de que se agrave.